Somos Sara y Aurora dos Pts hasta en lo más profundo de nuestro corazón!!

Nuestra historia comienza, casi por casualidad, Sara tiene una tía que es amiga de una PT (Aurora)  a la que, hace años le dijo, si tal vez podría echar una mano con las opos a su sobrina y así, tontamente, fue como nos vimos por primera vez, allá… por el 2012.

Fue dejar unos apuntes y ya está, aunque en ese momento no sabíamos todavía…, lo que el futuro nos iba a deparar.

Volvimos a coincidir un par de años más tarde en el Seminario de Carme Timoneda “Los Procesos Cognitivos y Emocionales como base para la Intervención en la Dificultades de aprendizaje”, lugar donde abordamos por primera vez cómo aprende el cerebro y fue a partir de aquí dónde comenzamos a replantearnos si lo que hacíamos ayudaba a aprender a nuestros niños.

Los devenires de la vida nos hicieron centrarnos en objetivos diferentes y mientras una estudiaba para obtener la plaza, la otra lo hacía para saciar esa curiosidad que tenía sobre cómo aprendemos. Además todo aquello que aprendía lo iba poniendo en práctica y observaba detenidamente lo que ocurría en la cabecita de sus niños, así fue como Aurora comenzó a practicar la neuro “sobre la marcha”.

Gracias a todo esto, cuando Sara obtuvo la plaza en el 2016, eligió ese cole para hacer sus prácticas y quién fue su tutora, pues… Aurora. Coincidió además que ese año prácticamente todo el claustro se iba a forma en “Pedagogía Hemisferial”, posteriormente descubrimos que esta pedagogía era un neuromito, ya que el cerebro funciona como un todo. Más en aquel curso nos sirvió para formarnos de manera conjunta.

Sí, sí, no tenéis ningún problema de vista, habéis leído bien, prác-ti-ca-men-te to-do el claus-tro, ¿Qué cómo conseguimos esto?, pues esa es… ¡otra historia!

Ahora, continuemos con esta…

Así que, allá, por aquel año 2016 fue cuando Sara comenzó su camino de lecturas, preguntas y sobretodo mucha neurocuriosidad.

De cuando en cuando, es decir, prácticamente todos los días, estas dos almas curiosas se juntaban, y allí se traían sus devaneos sobre lo que leían y entendían, sobre lo que no llegaban a comprender bien, sobre lo que le ocurría a este o aquel niño cuando estaban con ellos, sobre la dificultad que era aprender si un guía que les indicara por dónde seguir, sobre si de verdad un currículo lleno de contenidos era necesario, sobre la importancia de que la escuela fuera compensatoria socialmente o sobre cómo se podría mejorar la inclusión educativa, entre otras cosas.

El curso siguiente sus caminos laborales las volvieron a separar, pero como lo que la neuro ha unido no lo separa la distancia, ellas siguieron “reuniéndose” y buscando unos referentes que las guiaran. Todo esto les ayudó en “su cambio de mirada”, les llegó al corazón, les enseñó a acercarse de otra manera a sus alumnos, a sus dificultades, a sus preocupaciones, a sus ilusiones, a sus sueños y sobre todo les enseñó a que el aprendizaje lleva implícita la emoción.

Después llegó el postgrado La Neuroeducación de la UB y con él el inicio de ¡esta nueva aventura!

Este blog parte del deseo de compartir nuestros renovados neuroconocimientos, con él pretendemos dar respuesta a esas necesidades que hemos detectado en los colegios y para las que la neuroeducación nos da las respuestas.

Pretendemos que sea un blog de prácticas educativas basadas en nuestra propia neuroexperiencia, que os puedan ser útiles que os sirva para coger ideas.

Sara y Aurora